¿Tienes problemas para que tus plantas crezcan como te gustaría? Quizás tengas un pulgar verde, pero el sol nunca parece brillar del todo en las partes de tu casa donde tienes tus plantas verdes. Si buscas una forma de aportar una fuente de luz artificial que haga florecer tus plantas -de cualquier tipo-, no busques más allá de las luces de cultivo LED. En este artículo, exploraremos los beneficios de las luces LED, por qué son buenas para tus plantas y cómo seleccionar y utilizar las mejores luces LED para tus plantas verdes.
¿Qué son las luces de cultivo LED?
LED, que significa Diodo Emisor de Luz, son luces que utilizan menos energía que otros tipos de bombillas y no necesitan ser sustituidas con frecuencia. Son más brillantes y fiables que las luces incandescentes, y pueden personalizarse para temperaturas de color específicas. Esto las convierte en la elección ideal para quien necesita adaptar con precisión las fuentes de luz a sus plantas.
Cuando se trata de luces LED de cultivo, reproducen las longitudes de onda específicas de la luz solar que las plantas necesitan tanto para crecer como para prosperar. Las luces LED tradicionales están diseñadas para iluminación residencial o comercial, y es posible que no proporcionen el tipo de iluminación que necesitan tus plantas. Sin embargo, las luces LED de cultivo están específicamente diseñadas para proporcionar todas las longitudes de onda de la luz que las plantas ansían, garantizando que obtengan un espectro equilibrado de luz para mantenerlas sanas.
¿Por qué son mejores las luces LED de cultivo que otras opciones de iluminación?
Las luces LED de cultivo son más eficientes desde el punto de vista energético que cualquier otro tipo de luz de cultivo del mercado. Utilizan hasta un 85% menos de energía que las luces tradicionales, lo que significa que no sólo son más eficaces para mantener contentas a tus plantas, sino que también te ahorrarán algo de dinero en la factura de la luz. Las luces LED también producen menos calor que otros tipos de luces de cultivo, por lo que tus plantas no se quemarán si las dejas encendidas durante periodos más largos.
Una ventaja de las luces LED de cultivo es que son modulares, lo que significa que puedes combinar varias luminarias para crear un entorno de iluminación optimizado para tus plantas específicas. Las luces LED también tienen un voltaje bajo, lo que reduce el riesgo de electrocución, y no emiten rayos ultravioleta o infrarrojos, lo que reduce aún más el riesgo de poner en peligro tus plantas.
Selección de las mejores luces LED de cultivo para tus plantas
Al seleccionar una luz LED de cultivo, hay algunas cosas que debes tener en cuenta. En primer lugar, determina el nivel de potencia necesario para el tipo de plantas que deseas cultivar. También tendrás que decidir qué tipo de espectro lumínico quieres, así como la intensidad y el tamaño de las luminarias.
Para plantas más pequeñas, como las plantas exóticas de interior, sólo necesitarás un pequeño panel LED. Para plantas más grandes, como las hortalizas y las frutales, tendrás que asegurarte de elegir una potente luz LED de crecimiento que proporcione la luz suficiente para que las plantas crezcan sanas. Busca una luz de gran potencia, de unos 300 vatios o más, para asegurarte de que tus plantas reciban la luz suficiente.
También tendrás que determinar el espectro de color que necesitas para tus plantas. Las bombillas fluorescentes tienen una luz azul buena para las plantas de hoja verde, mientras que la luz roja es buena para las plantas de floración. Las luces LED pueden personalizarse con varios colores de luz, desde fríos a cálidos, en función de las necesidades específicas de tu planta. Sin embargo, si no estás seguro de qué color utilizar, una luz de espectro completo se asegurará de que tus plantas reciban todos los colores del espectro luminoso.
Uso de tus luces LED de cultivo
Una vez que elijas la luz LED de cultivo perfecta para tus plantas, tendrás que colocarla en un lugar adecuado. Tus plantas deben estar a una distancia similar de la fuente de luz, y deben recibir la misma cantidad de luz al día. También tendrás que asegurarte de ajustar las luminarias a medida que crezcan las plantas. Si las plantas están demasiado cerca de la luz, pueden dañarse o quemarse. Si están demasiado lejos, puede que no reciban la luz suficiente para alcanzar una tasa de crecimiento saludable.
¡Lo bueno es que las luces LED de cultivo tienen una vida útil muy larga! Estas luces pueden durar hasta 20 años, siempre que se cuiden adecuadamente. Para asegurarte de que tus luces de cultivo LED duren el mayor tiempo posible, limpia los respiraderos de aire y otras partes de la luz ocasionalmente. Indoo
